No quiere ser una cantante del momento por eso lucha día a día para permanecer.
Shakira, quien recientemente fue galardonada en los premios Alma por su contribución a la cultura latina en Estados Unidos, y serán transmitidos por televisión el próximo 12 de septiembre por la cadena ABC, habla en esta entrevista exclusiva del esfuerzo que ha significado llegar a donde está no sólo como latina en el mercado estadunidense, sino como cantante, ya que lo que más desea es ser vista como una artista que permanece vigente y no como una moda.
¿Qué representan para ti los premios Alma como latina exitosa?
“Un esfuerzo y un reconocimiento entre hermanos, entre compañeros, entre profesionales, de la industria de la música, del cine, de la televisión, del entretenimiento, pero lo más importante, que es un reconocimiento de miembros de nuestras raíces latinas, que están y han estado trabajando y abriendo camino en una industria difícil, un país en el que ahora son toda una posición, y doblemente les da importancia, es un esfuerzo muy lindo pero claro, aún hay un camino por recorrer y hay demasiada tela de dónde cortar; estamos en una posición privilegiada y costó mucho trabajo lo sé, por eso el valor tan importante de estos premios y nuestra gente”.
¿Tienes miedo a que esto termine?
“Hay dos grandes sueños para todo artista y obligaciones, esto en lo personal: lograr la aprobación inicial y, lo más difícil, permanecer en el gusto del público por muchos, muchos años. Esto es para todas las figuras públicas. Si la parte pública y la fama terminan o no es tan popular, no harán que nunca dejé de expresar mis sentimientos. La primera parte de mi sueño se ha cumplido; está aprobado, ahora estoy trabajando en la segunda parte del sueño, no ser sólo una ‘moda’, lucho con no serlo, le pido a Dios mucho que pueda cumplir este propósito, el resto es de la gente, de los medios, y del público sobre todo; y sobre todo, ser honesta de mi parte, y claro, el jefe supremo que es quien dispone (Dios)”.
¿Como latina sufriste para entrar al mercado estadunidense?
“Hubo muchas situaciones con contratos, y la confianza hay que ganársela y, sobre todo, con resultados. Los primeros discos lanzados o producidos a mis trece o catorce años y el siguiente a los dieciséis, no tuvieron mucha fuerza, pero el siguiente fue la verdadera oportunidad, esto con CBS, después la bendición fue recorrer Latinoamérica con mi álbum Pies descalzos y ésa fue la bendición, cuando pude convivir con la gente hermana latina, ellos son los que me dieron el voto necesario y me otorgaron la confianza necesaria para que pudiera seguir; estoy en deuda con toda Latinoamérica, con México sobre todo. México se volvió la fuerza más importante de mi confianza con la disquera y eso me permitió entrar con mucho más fuerza en los Estados Unidos”.
¿Por eso llegaste a grabar en inglés?
“Lo hice porque creo que la música es una manera también de crear lazos, de crear puentes, y de esa manera se creó el puente con Estados Unidos, porque mi música y mis letras funcionan de una manera distinta; la música que ahora los americanos escuchan es la música latina; la música que antes era de grupos menores, ahora es la música que circula en su ambiente, eso significa que el esfuerzo está rindiendo frutos”.
¿A qué te tuviste que enfrentar?
“A todo tipo de situaciones; a sentirte derrotada, a sentirte como que no estás haciendo lo correcto. Es un riesgo que corres, pero debes mantenerte fiel a lo que quieres lograr; a ti misma, abrir tu corazón y ser también humilde. Siendo humilde y sincera, con amor se abren fácilmente los caminos”.
¿Hay alguna receta para lograr el éxito?
“El camino de la música es muy variado y está ligado al corazón, a las entrañas, como ser humano está cargada de mi vida, de esto y aquello que ha aparecido y desaparecido en mi vida. A veces exageramos un poco con lo que debemos hacer con ella, pero la música, como la poesía, funciona con las palabras y el verbo le da una dimensión más hermosa y exagerada; hablar de todo lo que sucede en esta vida, ésa sería mi receta; ser fiel a quien fuiste al comienzo y a quien eres en toda tu vida. Las raíces de mi música no están ligadas directamente con el porro, con la salsa, ni con las raíces propias, tal vez de mi nación Colombia, pero sí ligadas con la fuerza latina; la receta es creer”.
¿Ahora cómo manejas la fama si eres una de las latinas más importantes a nivel internacional?
“Luchando contra el sentido de alejarte de tu humanidad, ése es el reto del artista, de la imagen pública; me recupero visitando a mi familia, a mis amigos, a la gente que me conoce sin todo el escaparate, que me conoce como fui y como soy; así me recupero, y siendo honesta con la prensa, siendo honesta siempre, así lo hago”.
¿A quién admiras?
“A la mujer en todas las etapas de la historia; la mujer es un punto de importancia, de valores aún malos o buenos. Siempre han fluctuado como fuerzas naturales de creación y de encaminar situaciones, sociales, culturales, al menos hoy en día, que protegen los derechos humanos. Hay gente que se preocupa por los indefensos; hay mucho que exigir, hay mucho en lo social donde debemos concentrar nuestras energías en eso, hay mucha gente pobre, mucha gente con hambre, con mucho dolor y también hay mucha falta de atención, así que ése es nuestro trabajo al momento de adquirir la atención, debemos revirarla a donde es necesario; se genera demasiado dinero en la industria del entretenimiento y yo siento, al menos por ser latina, el deber, el verdadero deber es llevar un poco de nosotros a donde se necesita”.
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